Alumnos de 6º
Básico y de 3º Medio han decidido seguir a Cristo. Los primeros
por medio del servicio de acólito, mientras que los segundos a
través del Sacramento de la Confirmación.
Alumnos de 6º Básico y de 3º Medio han decidido seguir a Cristo.
Los primeros por medio del servicio de acólito, mientras que los
segundos a través del Sacramento de la Confirmación.
El día viernes 06 de noviembre, once niños de 6º
Básico recibieron el alba que los caracteriza como acólitos.
Asimismo, aquellos que ya realizan este servicio renovaron su
compromiso. Se trata de un grupo que el padre Jorge Laplagne
acompaña tras realizar su Primera Comunión.
A la eucaristía los niños entraron con su uniforme. Luego de la
bendición del sacerdote se les entregó el alba y fueron sus
padres los que revistieron a los pequeños, como símbolo de apoyo
y compañía.
Tanto el Padre Jorge Laplagne como nuestro
rector, el Hno. Jesús Triguero, destacaron la decisión de los
niños de comprometerse a seguir a Dios a través del acolitado.
En la oportunidad, Alejandro Cabrera y Pablo Silva, alumnos de
4º Medio que ya terminan su servicio, entregaron un testimonio a
sus compañeros.
Por su parte, los días sábado y domingo, más de 90 jóvenes
recibieron el Sacramento de la Confirmación. Fueron 39 hombres y
mujeres que se prepararon a través de la catequesis, y 58 por
medio del Movimiento Marcha. Galo Fernández, Vicario de la
Esperanza Joven, y Juan Francisco Pinilla, Vicario de la
Educación, fueron los sacerdotes que celebraron estas
ceremonias.
Ambos se manifestaron muy contentos por la
invitación y gratificados por la preparación que vieron en los
jóvenes. Destacaron la conciencia para asumir este sacramento,
al que los muchachos accedieron libremente. También recalcaron
el ambiente de oración, respeto y silencio que se vivió en las
ceremonias.
El alumno David Herrera solicitó el Sacramento en la celebración
del sábado, y dio las razones que lo llevaron a aceptar este
desafío. Asimismo, los confirmandos del día domingo le habían
entregado una carta al Padre Pinilla con el mismo propósito. El
sacerdote puso énfasis en el sentido de cordada que vio en
ellas, y cómo se vive a la luz de la Santísima Trinidad.