Los niños y niñas
de 3º Básico metieron las manos en la masa, literalmente, para
preparar unas ricas cocadas.
Manjar, nueces, mostacilla de colores, chips de
chocolate y, por supuesto, coco, fueron los ingredientes que
trajeron hasta el colegio los alumnos y alumnas.
Transformaron la sala de clases en una verdadera
cocina, y ellos mismos fueron los chefs con sus respectivos
delantales. Quedaron con las manos bien pegajosas, pero el
resultado fue delicioso.