Con una cálida
acogida nos esperaban en San Fernando, sede este año del VI
Encuentro de Administrativos Maristas.
Iniciamos nuestro IV Encuentro recorriendo las dependencias del
colegio para luego pasar a tomar un exquisito desayuno en el
casino del colegio. A los más nuevos les sorprende, las
construcciones siempre tienen el mismo estilo, dicen, es el
primer paso de la acogida: es como encontrarse en casa.
Como ya es tradición se tomó la foto grupal de
todos los administrativos que participaron del encuentro.
Vivimos una eucaristía distinta, con una misa a la chilena.
Finalizó ésta con un esquinazo animado por el Club de Cueca de
San Fernando. Con hermosos pies de cueca bailaron tanto los
miembros del grupo folclórico como los asistentes al encuentro y
su rector.
Luego en el salón de actos se presentó el grupo instrumental,
orgullo del colegio, que dirigido por la profesora María
Francisca Mena Catalán, interpretó un variado repertorio.
El tema del día estuvo a cargo del Hermano Jesús
Pérez, delegado de misión en Chile, que reflexionó sobre las
prioridades provinciales del trienio 2008-2011. Centrando sus
palabras en tres temas esenciales: una provincia de discípulos y
discípulas, una provincia misionera y una provincia que extiende
su tienda, nos dijo que habrá una preocupación central en la
formación espiritual de cada uno de los miembros de cada uno de
los estamentos de cada colegio, poniendo énfasis en el cultivo
de la fraternidad. Todos estamos llamados, la invitación es
para todos, dijo.
Después del almuerzo nos dirigimos a Viña Casa
Silva donde disfrutamos de una demostración de rodeo chileno y
la degustación de sus vinos. Recorrimos sus instalaciones que
cuentan con un hotel, restaurante, viñedos y una hermosa bodega
y cava de vinos. De vuelta en el colegio tomamos onces al más
puro estilo campestre con sopaipillas, quesos y jugos.
Estamos muy agradecidos por el recibimiento y
acogida, porque no son sólo los administrativos los que nos
atendieron, es todo el colegio desde sus profesores, alumnos,
auxiliares, su rector, don Claudio Arellano, los que animaron la
actividad. Será hasta el próximo año 2009, a Limache los
pasajes.