Con mucho
entusiasmo y compromiso, los jóvenes de las tres etapas de
MarCha han desarrollado durante el mes de enero distintas
actividades, iniciando así el año en que se conmemora el
aniversario número 25 de este movimiento pastoral en Chile.
Los jóvenes que están en Segundo Medio viajaron
hasta el Colegio Diego Echeverría en Quillota para vivir su
Campamento de Formación (CDF). Entre el 2 y el 7 de enero, las
cordadas del IAE (Vigías, Magandá y Carpe Diem) compartieron con
jóvenes de otros colegios en donde se vive el Movimiento MarCha:
Angelus (La Serena), Destellos (Los Andes), Suave Brisa (Villa
Alemana), Columinis (Rancagua), Puente (San Fernando) y Puerto
Esperanza (Curicó).
El momento más especial para los peregrinos fue
cuando efectivamente vivieron la propuesta que les presenta el
movimiento al subir una montaña. Como cordada ascendieron los
cerros del Parque Nacional La Campana. Allí, experimentaron lo
que significa avanzar como grupo, cargando sus mochilas, sin
dejar a nadie atrás y apoyando a los compañeros que estaban más
cansados. Al llegar a la meta final, oficialmente pasaron a la
etapa Sendero.
Por su parte, los peregrinos de Tercero Medio
hicieron su SAC (Servicio de Amor Concreto) organizando las
Colonias Urbanas en la comuna de Maipú. Entre el 5 y el 12 de
enero trabajaron con cerca de 60 niños de 5 a 12 años.
Contaron con la activa participación de la
comunidad de la Capilla Beata Madre Teresa de Calcuta,
perteneciente a la Parroquia Santa María de la Esperanza del
Padre Jorge Laplagne, capellán de nuestro colegio. El sacerdote
además, celebró la eucaristía con los guías y peregrinos a cargo
y los preparó en temas formativos.
El jueves 10 recibieron la visita del Rector
Jaime Inostroza y el Vicerrector Hermano Jesús Castañeda quienes
pudieron ver en terreno cómo los niños de las poblaciones
cercanas disfrutaron de unos días de vacaciones en compañía de
los tíos de las cordadas Rabboní, Convicción y Acre que
prepararon para ellos juegos y talleres. Durante toda la semana,
los jóvenes a cargo de las actividades alojaron en el Colegio Mater Purísima.
Por último, entre el 10 y el 20 de enero, los
peregrinos de la etapa Cumbre realizaron las misiones de verano.
Las cordadas Pasos y Otoniel viajaron hasta Curicó para ayudar
en las distintas necesidades de la comunidad.