Las diferentes Coordinaciones de Pastoral de Prekinder a 4º
Medio organizaron diversas actividades. En el Ciclo Inicial los
profesores y administrativos de nuestro colegio realizaron una
jornada de reflexión a partir de las 17:30 horas. De 2º a 6º
básico los profesores prepararon una onces para el personal
auxiliar del colegio. La coordinación de 7º Básico a 2º Medio
visitó a las personas que se encuentran enfermas en nuestro
colegio. Los profesores de 3º y 4º Medios concurrieron al
Hospital de Buin.
Luego se llevó a cabo la Eucaristía de Jueves Santo
que da inicio a la celebración del Triduo Pascual. Se rememora
la Última Cena de Jesús con sus discípulos. En ella, Cristo
instituyó el sacramento de la Eucaristía, donde Él se hace
presente a través de la conversión del pan y del vino en su
Cuerpo y su Sangre, y el sacramento del Orden Sacerdotal.
Se consagran los óleos, es decir, los aceites que
se ocuparan para los diferentes sacramentos. Son muchos los
gestos que se evocan en el Jueves Santo. Uno de ellos es el
signo de humildad y sencillez que realizó Jesús al lavarle los
pies a todos sus discípulos.
Viernes Santo
El viernes por la mañana se realizó el retiro espiritual para
los padres de Primera Comunión y el retiro juvenil a cargo del
grupo Marcha.
Por la tarde se revivió el Vía Crucis por las
calles cercanas al colegio. Distintos símbolos nos recordaron la
Pasión de Cristo a través de las catorce estaciones que fueron
recorriendo el camino en que Jesús cargó la Cruz hasta el Monte
Gólgota donde fue crucificado.
Al regresar al colegio se vivió la ceremonia de la
Adoración de la Cruz. Después de la liturgia de la palabra fue
entregada a los asistentes la comunión y quedamos a la espera de
la Resurrección de Nuestro Señor.
Sábado Santo: Vigilia Pascual
Con gran alegría por la Resurrección del Señor, realizamos la
Vigilia Pascual en nuestro Colegio que es la celebración más
grande e importante que tenemos los cristianos. Es una noche de
vela (vigilia) en honor al Señor. Durante ella la Iglesia espera
la Resurrección del Señor y la celebra con los sacramentos de la
iniciación cristiana: Bautismo, Eucaristía y Confirmación.
Esta noche culmina la larga espera de Cuaresma. Juntos
celebramos el paso de las tinieblas a la luz, de la muerte a la
vida. La Iglesia entera proclama que Jesucristo ha resucitado.
Esta noche el Señor nos ilumina con su Gloria.
Encendemos el Cirio Pascual, signo del Señor Resucitado.
Recorremos la Historia de la Salvación a través de las lecturas
bíblicas. Renovamos nuestras promesas bautismales y celebramos
esa misma salvación en los sacramentos de la iniciación
cristiana.
La Celebración y organización de la gran Liturgia Pascual estuvo
a cargo del Grupo Scout Alonso de Ercilla quienes tenían todo
previsto en el patio para el inicio de la liturgia del fuego que
se inició alrededor de las 21:00 horas.
Con la bendición del fuego a cargo del celebrante,
padre Vicente Legarda, se invitó a representantes de la
Comunidad Marista a encender su propio cirio y pedir al Señor
Resucitado que acompañe a los diferentes grupos y estamentos a
vivir como Él quiere que vivamos.
Luego el celebrante procedió a signar el Cirio Pascual y clavar
los clavos con los granos de incienso y encender el Cirio
Pascual proclamando: Luz de Cristo, que resucita glorioso,
disipa las tinieblas de nuestro corazón y nuestro espíritu.
Después se inició la procesión hacia la Capilla
central presidida por el Celebrante encaminado nuestros pasos de
la oscuridad a la luz, seguimos al Cirio Pascual cantando: Esta
es la Luz de Cristo. Seguidamente el sacerdote canta: Luz de
Cristo y la asamblea contesta: Demos Gracias a Dios.
Continuamos cantando Esta es la Luz de Cristo.
En el pasillo central de la Capilla, nuevamente el sacerdote
canta Luz de Cristo y respondemos Demos gracias a Dios. En
este momento la asamblea encenderá las velas por primera vez.
Continuamos cantando.
Una vez que toda la Asamblea se encontraba dentro
de la Capilla, y a oscuras, y una vez puesto el Cirio Pascual en
un candelabro, proclamamos el Pregón Pascual dirigido por el
Hno. Agustín Carazo. Es el ofrecimiento del Cirio a Cristo
resucitado. Es el recuerdo de la noche Santa, en la que
celebramos con gozo del triunfo de Cristo, nuestro Señor, que
resucita glorioso del sepulcro.
A continuación se inició la Liturgia de la Palabra
a oscuras mientras se proclamaban las lecturas principales de la
Historia de la Salvación, que es un repaso de los momentos
fundamentales de la historia de Dios en medio de su Pueblo. En
primer lugar las del Antiguo Testamento, con la lectura de la
Creación del mundo y del hombre, y que fueron matizadas por los
cantos y las oraciones.
Una vez leídas las lecturas del Antiguo Testamento
se cantó un Himno a Dios (Himno de Alabanza) y se encendieron
las luces del templo, las velas del altar. El sacerdote entona
solemnemente el Gloria, que todos prosiguen. Se tocan las
campanas anunciando la Resurrección del Señor.
Se leyó la Carta de San Pablo a los Romanos (Rom. 6, 3-11) en la
que se proclama: Cristo, una vez resucitado de entre los
muertos, ya no muere más
La Asamblea se pone de pie para proclamar: ¡CRISTO HA
RESUCITADO! Se anuncia el Evangelio de la Resurrección y la
Homilía.
A continuación, se inicia la Liturgia Bautismal,
que en la noche de la Resurrección recuerda a los cristianos que
hemos vuelto a nacer y renovaremos nuestro Bautismo.
Se pregona la Letanía de los Santos y el sacerdote bendice el
agua bautismal y se hacen la renovación de las promesas
bautismales y el Credo.
En esta oportunidad se realizó el bautizo del catecúmeno Felipe
Silva Olmos y se procedió a asperjar a la Asamblea con el agua
bautismal.
Luego se realizó la Oración Universal para dar
inicio a la Liturgia Eucarística, llegando al momento central de
esta celebración. Jesús resucitado se hace presente entre
nosotros con aquellos signos que Él nos dejó: el Pan y el Vino
que por mandato suyo mediante el servicio sacerdotal convierte
en su Cuerpo y Sangre. El único alimento que nos hace partícipes
de la vida eterna.
Una familia de nuestra comunidad, como signo de entrega y
servicio desinteresado, se ofrecen y ofrecen las especies de pan
y vino.
Después de la comunión, y en el momento de la
Acción de Gracias, el Sr. Rector don Jaime Inostroza Marín,
dirigió un saludo de Pascua de Resurrección a toda la Comunidad
Marista, y que en su parte medular expresó:
Hoy es un tiempo de celebración para nosotros. El Señor con su
persona resucitada nos llama a todos y cada uno a vivir la vida
con alegría y a superar con ÉL todas nuestras aflicciones y
problemas.
Nosotros los cristianos sabemos que la vida puede tener momentos
de cruz, soledad y dolor, pero tenemos fe que todos esos
momentos encuentran sentido en la Vida Nueva que el Señor nos
regala en su infinito amor.
Como maristas, junto a nuestra Buena Madre
caminamos el sendero del crucificado, sabemos que debemos estar
allí con el que sufre, con el pobre, con el abandonado; así lo
quería también el Padre Marcelino. Pero debemos estar para
anunciar el amor del Señor, para animar ese desconsuelo y en
medida de nuestras fuerzas aliviar ese dolor.
Los tiempos que corren nos exigirán a todos nuevas fuerzas para
que una cultura de la vida impere por sobre una cultura
instrumental y mercantilista; debemos hacer oración y acercarnos
a la Eucaristía, no desfallecer y estar siempre atentos a lo que
el Señor nos llame a vivir.
Un fraternal y querido saludo en esta Pascua de
Resurrección para toda la Comunidad Marista del Instituto Alonso
de Ercilla: hermanos, profesores, personal administrativo y
auxiliar, padres de nuestras familias, alumnos y ex-alumnos.
¡El Señor ha resucitado! Demos gracias a Dios.
Luego el Sr. Rector invitó a todos los presentes a compartir un
chocolate fraterno en los patios del Colegio preparado por la
Pastoral Familiar. Felices Pascuas. ¡El Señor ha Resucitado!
¡Aleluya!
Jueves Santo
Viernes Santo
Sábado Santo
de