Los niños, niñas y jóvenes "vinieron al encuentro, con una gran esperanza", y aunque las manos unidas no estaban permitidas debido al protocolo COVID, sí había "signos de nuestra hermandad" por doquier.

Ese sábado, se reunieron la Bandada Amuillán, la Compañía Kallfü Newen Tripán, la Tropa Acutunailén y la Avanzada Peñiwengan, y se pudo celebrar las anheladas ceremonias de paso de bandada a compañía y de compañía y de tropa a avanzada.

Además, la compañía festejó la primera ceremonia de promesa en fase tres.

Pero no todo fueron ceremonias: hubo juegos, danzas y talleres. Algunas unidades sólo querían reencontrarse y conversar, después de tanto tiempo separados, mientras que otras no dudaron en ponerse manos a la obra a construir artefactos, como un calefactor solar de agua.