Lima, 11 de octubre del 2013

Apreciados hermanos y miembros de la familia marista:
Reciban un saludo afectuoso mío personal y de los miembros del Consejo Provincial. En la sesión que acabamos de terminar, hemos estado compartiendo la situación de nuestro hermano Luis y los sentimientos que tal situación ha despertado en nosotros. Todos, al igual que ustedes, estamos conmocionados y nos sentimos impotentes para lograr aquello que deseamos desde lo más profundo de nuestro ser.

Al término de nuestro compartir, queremos enviarles esta comunicación, que sería la decimoséptima de las que han recibido, informándoles de la situación actual de nuestro hermano. Como saben, fue trasladado a Chile el lunes 30 de septiembre y ubicado en el Hospital José Joaquín Aguirre, hospital clínico de la Universidad de Chile. A los dos días de su estadía se le hicieron los exámenes neurológicos que precisaba. Los resultados han sido peores de los que esperábamos. El daño cerebral no está localizado en el tronco, como inicialmente se pensaba, sino que reside en la corteza cerebral. Esta situación hace más difícil una recuperación como a nosotros nos gustaría.

Actualmente, no es el momento de saber cuánta recuperación va a conseguir, pero los informes médicos señalan que el pronóstico de recuperación es francamente malo. En este sentido, es probable que no vaya a recuperar conciencia. Por nuestra parte, haremos todo lo que esté a nuestro alcance para que nuestro hermano tenga la atención médica que requiere. En unos días más, será trasladado a la Clínica Los Coigues, en Santiago, que es la clínica especializada en el tratamiento de estos casos.

Como personas creyentes que somos, queremos acompañar la atención médica con nuestra oración confiada. Sabemos que para Dios no hay nada imposible y que en sus manos está el poder para conceder lo que la ciencia médica no puede conseguir.

Por eso, invitamos a toda la Provincia, es decir a los hermanos, laicos/as que trabajan en nuestras obras, alumnos, exalumnos, padres de familia, amigos/as de nuestro hermano a organizar una NOVENA de oración pidiéndole al Señor, directamente a Él o por mediación del H. Francisco, la recuperación del H. Luis y si tal recuperación no ocurre como deseamos, que nos dé la aceptación y el saber leer el hecho lamentable ocurrido con ojos de fe.

Para realizar la NOVENA les ofrecemos dos opciones para que cada uno/a, personalmente, o cada comunidad religiosa, comunidad laical, fraternidad o grupo elija la que sintonice con su sensibilidad orante: a) Hacer una novena al Hno. Francisco o b) Rezar directamente al Señor, durante nueve días. Acompaño esta carta con una oración preparada por el Hno. Mariano para este fin y el texto para quien realice la NOVENA al H. Francisco. Podemos iniciar esta NOVENA el día 20 de octubre.
Con los miembros del Consejo les agradezco esta corriente de oración y me despido, quedando como siempre, a su disposición.

Un abrazo de hermano,
Hno. Antonio Peralta