La en la písta y fosos lucha fue del estadio Playa Ancha de Val paraíso. También se dio en las canchas de Limache y en los gimnasios de Villa Alemana. Durante síete días de competencia los protagonistas fueron los alumnos atletas y los barristas, jóvenes que derrocharon pasión e ingenio. Marcelino Champagnat es el patrono de los Hermanos Maristas. Una congregación que en la enseñanza ha volcado toda su fuerza e interés. En Chile y el mundo posee colegios cuyo sello es la excelencia académíca. Sin embargo, no por esto descuida otros aspectos de la formación, como son los que se desprenden del deporte.  A la rígurosidad con que se imparten las ciencias, los profesores y hermanos maristas agregan los sinsabores y alegrías que a través de la práctica del basquetbol y atletismo (por nombrar a dos de naturaleza colectiva e individual) ayudan a Ia integración social y a templar el carácter.  Por todo, las Olimpiadas Maristas que desde 1972 se celebran con gran éxito. son todo un acontecimíento para esta comunidad. En su XIX versión, el Colegío Champagnat de Villa Alemana fue el anfitrión. Padres y apoderados del establecimiento se comprometieron al extremo de abrir sus hogares y de adoptar por una semana a un (y a más de uno) joven de los colegios Nuestra Señora de Andacollo, de La Serena; Instituto San Martín, de Curicó; Instítuto O'Higgins, de Rancagua; Instituto Chacabuco, de Los Andes; Instituto San Fernando. de San Fernando; Fundacíón Diego Echeverría e Instituto Rafael Ariztía, de Quillota; y Colegio Marcelino Champagnat e Instituto Alonso de Ercilla, de Santiago.  Diez colegios, poco más de medio míllar de atletas. Al cabo, poco más de medio míllar de ilusiones que se fueron prendieron o apagando a la par de los vaivenes propios del pulso de un basquetbolista, la ínspiración del armador en el voleibol, la sensibilidad del goleador en el 15árbol y la concentración, pot ejemplo, del lanzador de la bala en el atletismo.  Hubo lágrimas de alegría y de las otras. En las canchas reinaron las caras hoscas, los ceños fruncidos, afuera primó la amístad y, por qué no decirlo. cambios de luces que todavía aceleran corazones.  Y si de pálpitos se trata, Alonso de Ercilla respondió al favoritismo y por segundo año consecutívo se consagró campeón olímpico: ganó en atletísmo, basquetbol y voleibol. En fútbol debió conformarse con la plata.., el oro fue para el Diego Echeverría. Esta es la pequeña gran historia de niños maristas de 15 y 16 años que a fuego los marca el legado de Marcelino Champagnat: educar para servir.  La evaluación de los profesores  Rodrigo Gesell, del Colegio Champagnat de Villa Alemana, tuvo a cargo la coordinación general de les Juegos. Según él existen dos motivos para estar súper orgulloso: la excelente organización y que uno de sus alumnos, Pablo Olivares fuera dístinguido como el mejor atleta de las olimpiadas.'Estamos muy satisfechos. Somos un colegio chico dentro de la congregación y sacamos adelante una tarea enorme. Esta fue una instancia para poner a prueba lo mejor de cada uno y lo conseguimos"; resumió.  Oscar Hidalgo, del Colegio Marcelino Champagnat de La Pintana, destacó el premio que la comisión técnica le dio a Freddy Ordenes Vilches como el mejor basquetbolista, "Todavía no lo asimilamos bien... con el resto de los profesores lo queremos destacar y rendirle un homenaje junto a sus compañeros, creo es lo que corresponde".  Francisco Javier Martín, del Alonso de Ercilla de Santiago, campeón olímpico por segundo año consecutivo, recordó que como alumno el participó de tas primeros Juegos en 1972. Treinta y un años después sigue disfrutando de lo que sígnifica convivir y competir bajo los valores maristas. Según Martín, llegar a ras cuatro finales superó todas las expectativas, aunque sin duda respondió al ínterés y afanes que el Alonso de Ercilla siempre se plantea a partir del trabajo que desarrolla su departamento y las facilidades que desde el hermano rector,  Jesús Triguero, pone a disposición de sus deportístas, Finalmente, Claudio Osorio, profesor de fútbol de los ercillanos, destacó la madurez alcanzada por sus jugadores al margen de que no hayan podído quedarse con el oro olímpico.  "No hay que restarle méritos al Diego Echeverría, un cuadro que cuenta con un excelente entrenador y jugadores de macha calidad", concluyó. Los Mejores Pablo Olivares 
Colegio Champagnat, Villa Alemana
"Fue emocionante recibir el premio, más aún después de que ésta fue mi cuarta olimpiada. EI interés por atletismo surgió cuando entre al colegio, donde estoy desde 1 ° Básico. Estos Juegos, por todo. me dejan un sabor muy especial, pues además de la satisfaccíón de haber sido reconocido como el mejor, pude retribuir las atenciones que en su oportunidad me dieron a mí En mi casa tuve a Sergio Carrasco ya Patrício Flores. atlelas de La Pintana y La Serena, respectivamente. Un saludo para ellos'. Freddy Ordenes Vilches 
Marcelino Champagnat, de La Pintana 
"El premio fue una sorpresa, aunque me lo habían anunciado. En todo caso, soy consciente de que el basquelbol es un juego de conjunto, así es que no me creo el cuento Al basquetbol comencé a jugar a los 11 anos motívado por mi hermano Arnaldo y mi tía Evelyn. Lo hice en el club Enrique Lanz, de Puente Alto. A los 13 años íngresé al colegio y ésta fue mi tercera olimpiada y, por edad, tengo la posibilidad de ir a una cuarta, que va a organizar el Instituto Rafael Ariztía de Quillota" Pablo González Cubos 
Instituto Alonso de Ercilla, de Santiago
"Con todos mis compañeros comparto la distinción. Al fútbol me asomé formalmente en 4" Básico (al colegio ingresó en kinder y hoy cursa 2o Medio) y siempre me apasionó el arco. Esta fue mi segunda olimpiada y aunque superamos el 4 o lugar deja anterior, igual quedé amargado parque me había mentalizado para ganar el oro. Sin embargo entíendo el deporte como una experiencia de vida y ya estoy nuevamente en pie pensando en el próxímo desafío. Mis agradecimíentos y saludos a la familia Figueroa Cotroneo que me acogió en Villa Alemana'. Moisés Poblete 
Instituto Alonso de Ercilla, de Santiago
"El premio me sorprendió porque hubo jugadores bastante buenos... No obstante, lo mejor fue salir campeones y por segundo año consecu- tivo, además vencíendo a nuestro rival tradicional, Instituto O'Higgins de Rancagua En el colegio estoy desde kinder y desde el 4 ° Básico practico vole ibol Jugué un tiempo en U n iversidad Catolica, pero por los estudios lo dejé Me gustan lodos los deportes y éstas fueron mis cuartas olimpíadas. una instancía maravillosa porque conoces a mucha gente"
Mención especial hay que hacer de la Barra Oficial de nuestro colegio, organizada por el Centro de Alumnos, que tuvo una presentación impecable. Alentando en todo momento a los diferentes equipos de las distintas ramas que nos representaban. En esta oportunidad fue acompañada por los profesores Ernesto Reyes, Alejandro Huenuqueo, Raúl González y Mario Orellana.